CONCLUSIÓN PAULINA BUSTAMANTE

Luego de terminar el estudio de caso sobre la problemática “Situaciones críticas que provocan un retroceso en los valores de las personas”, hemos llegado a la conclusión de que no se  tiene un retroceso de los valores ya inculcados gracias a la familia, el colegio y/o Jardín, si no que tranzamos nuestros valores, o los dejamos de lado momentáneamente, dependiendo de las situaciones que particularmente uno considera como critica en la vida.

Como futura educadora de párvulo, la tarea de inculcar valores en  los niños y niñas no es fácil, ya que por mucho esfuerzo que uno ponga de educar en valores, actuar con valores dentro del aula, y promulgar valores de respeto, tolerancia, empata, justicia, etc. , y por sobre comprometer a la familia de trabajar en conjunto todos con un mismo fin, los párvulos tienen constantes y diverso estímulos que contradicen los valores que se les entregan a diario dentro y fuera del aula, por lo tanto están muy propensos y vulnerables a tranzar sus valores y/o dejarlos de lado según las situaciones que ellos mismos estimen criticas, por lo tanto ahí esta nuestro rol y la importancia de nosotras en la formación de los niños y niñas en tan temprana edad, fomentar la autonomía  de los educandos y crear confianza en ellos, cosa de que frente a cualquier situación “critica”, tenga la madures y la sabiduría necesaria de pensar en la mejor solución para salir adelante sin tener que dejar de lado sus valores y principios y lo mas importante, sin la ayuda de algún adulto, o de alguien que lo este supervisando para tomar sus decisiones, por lo tanto es muy importante crear niños y niñas autónomos, cosa de que puedan valerse por si mismo tomando las mejores decisiones.

Cabe recalcar que para educar en valores, no solo tenemos que difundir los valores y enseñarlos como tal, si no que tenemos que fomentarlos dentro del aula, y ser modelos a seguir, es decir somos nostras las que tenemos la misión de que los niños y niñas, vean y sientan que los valores son parte de uno, y los llevamos en todas las situaciones del día a día y de nuestra la vida; cuando respetamos a los compañeros, cuando somos solidarios, cuando nos ponemos en el lugar del otro, etc.

Es de vital importancia reconocer que todos los niños y niñas son distintos, ya sea de forma física, emocional, cognitiva, afectiva,  por lo tanto la forma de llegar a ellos tiene que ser según sus formas de aprendizaje y según sus interés, ya que si no se tiene en consideración esta diversidad, no podremos llegar a ellos y la educación en valores no podrá ser efectiva, por que no lograremos llegar a causar la atención de los educandos.

No fue un trabajo fácil llegar a esta conclusión, pero gracias al grupo que se me ha destinado y elegido, pudimos realizar un buen estudio de caso, entrevistando a diferentes profesionales,: enfermeras, profesores, psicólogos, etc., trabajando en conjunto, debatiendo problemáticas , tomando en consideración todos los diferentes puntos de vista, para poder llegar a la mejor de las conclusiones, supimos tomar roles protagónicos , haciéndonos cargo de eso y por sobre todo cumpliendo con los objetivos diseñados por nosotras mismas, gracias a todo eso pudimos llegar al final de este estudio de caso, que costo aproximadamente un mes.