Cada persona
es única y especial y por tal motivo le confiere valor y significado a la
realidad, pero esta perspectiva de realidad crece de acuerdo con nuestra
historia de vida, así mismo tiene que ver con factores psicológicos, sociales y
económicos; y de acuerdo a estos factores vamos creando, encontrando y a veces
distorsionando o tranzando los valores y el significado a la vida, por lo que
cada persona valora de manera diferente. De estas valoraciones que tenemos
acerca de la realidad nace el valor hacia las personas, hacia las cosas, hacia los animales, hacia la
vida y hacia nosotros mismos.
Los valores
humanos influyen en la creación de nuestra personalidad, ya que esta consiste
en gran parte en creencias, fundamentos o actitudes; que los hombres y las
mujeres tienden a actuar saludable mente cuando tienen valores basados en la
razón y la experiencia; y que cuando tienen metas y propósitos absolutistas y
proteccionistas propenden a sentir trastornos emocionales; es por esto que los
valores influyen de modo significativo en el comportamiento y que modificar los
valores de uno, causa directa mente modificación de la personalidad por ende se
llega a tranzar con los valores.
Aunque los valores son inherentes a la persona y cada quien establece
su escala de valores, también es cierto que éstos son contenidos que se deben
transmitir como contenidos de enseñanza-aprendizaje en la escuela, significa
que se pueden enseñar y aprender, no sólo como una dimensión de aprendizaje que
se debe tener en cuenta en el proceso educativo, sino como uno de los factores
básicos en la calidad de la educación. En esta experiencia educativa la figura
y el rol del maestro son la base fundamental como orientador del alumnado hacia
la consolidación de los objetivos propuestos, para el logro supremo de ir
transformando al mundo que vivimos en algo especial y hermoso.
A pesar de que
este trabajo fue una gran responsabilidad y estuvimos llenas de desafíos,
logramos como grupo aprender a organizarnos a ser responsables, indagamos en
temas que nosotras como futuras educadoras, debemos tener una noción.
Debemos además
adoptar una actitud positiva frente a medios que alteran los valores que nosotras entregamos y al mismo tiempo alteran
nuestro papel Protagónico en la sala de clases. Debemos ser fuertes y asumir el rol de guía, conductor y facilitador
del aprendizaje y entrega de valores.
Debemos
reconocer la diferencia entre los alumnos, su diversidad de estilos
cognoscitivos, sus distintos estilos de aprender, de decidir y de actuar.
Nuestra meta
como educadoras, no sólo debe ser lograr un desarrollo de las habilidades
cognoscitivas de pensamiento crítico, creativo y auto regulador. Si no también
acrecentar a la intuición, imaginación, lo subliminal y una estabilidad
emocional, para así prevenir casos de depresión infantil y por ende que se
vuelva mas frecuente el transar los valores.
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