CONCLUSIÓN JAVIERA TORO

La formación valórica es la base fundamental de cada persona, como ser único y racional dentro de la sociedad.

El concepto de formación valórica,  alude a distintas normas básicas de convivencia y como diría Adela Cortina existen unos mínimos de conducta compartidos por todos los ciudadanos, como no robar, no matar, etc.

Los valores, se ven expuestos en distintas situaciones emergentes de la vida, situaciones cotidianas en las que nos encontramos en la obligación de decidir si lo que haremos es lo correcto o no, pero además es complejo, ya que cada persona tiene sus parámetros en cuanto a lo que está bien y a lo que está mal. Y en relación a este punto, me gustaría destacar que las personas que más influyen en estos parámetros, más que nosotros mismos, es el entorno que nos rodea; Y ya que la familia es el primer vínculo que establecemos y como primer vínculo, es también nuestro primer modelo a seguir, los hace personas significativas en cuanto a la formación valórica que adquirimos desde que somos pequeños.

 Pero cabe mencionar además, que como se demuestra en una de las entrevistas realizadas en nuestro estudio de caso, los niños son vulnerables a cambiar de parecer, dependiendo de sus intereses y convicciones, son seres muy influenciables por los medios, sus pares y personas significativas. Esto no quiere decir que tengan un retroceso en sus valores, mas bien que transan, o como diría Kohlberg, conforme aumentan las interrelaciones con sus iguales, lo hace también la influencia de éstos, y cuando existen discrepancias entre las reglas morales del hogar y las del grupo, los niños suelen aceptar las de este último, y rechazar las de la familia.

Por otro lado algunos adultos son personas con una formación valórica más sólida en algunas situaciones, como en la autorrealización que expone Maslow en la pirámide sobre la jerarquía de las necesidades humanas, abarcando moralidad, creatividad, falta de prejuicios y resolución de problemas entre otros. Pero también transamos nuestros valores, como se puede apreciar en el primer espacio de esta pirámide, Fisiología, ya que necesitamos satisfacer nuestras necesidades básicas a como de lugar.

“No debes tener respeto por los otros hombres mas que por ti mismo, ni obrar mal cuando nadie lo sepa, ni cuando todos lo sepan si no que debes tener para ti  mismo, el mismo respeto e imponer a tu alma esta ley: no hacer lo que no se debe hacer”

Me detengo en este punto, porque a mi parecer abarca los valores en toda su dimensión, dejando de lado teorías, situaciones y pensamientos. Ya que habla en parte sobre el autoconocimiento, el auto cuidado y la autoestima, relacionando éstos con el prójimo, sean estos conocidos o no, no tiene mayor relevancia, e incluso se puede tomar por el lado de no hacer al otro no que no te gustaría que te hicieran a ti, independiente de la situación. Y en relación a esto me gustaría destacar una palabra sumamente significativa en relación a los valores, el “Respeto”, y al hablar de este concepto es importante destacarlo como la base fundamental de la ética y la moral. El respeto es “aceptar y comprender tal y como son las personas, teniendo tolerancia al momento de escuchar a pesar de que muchas veces no compartamos la misma opinión frente a distintos temas. El respeto además, es no pasar a llevar a libertad del otro, a pesar de que los parámetros de libertad propio no estén tan claros. 

                                                                Javiera Toro